Uno debe dormir bien. Al menos ocho horas por día. Debe levantarse y prepararse un buen desayuno, que incluya leche, pan, no tanto jugo porque tiene mucha azúcar, mejor un par de naranjas. Uno debe levantarse temprano y tomar el transporte público para no pagar taxis. Es egoísta esto de los taxis*. Tanto gasto de energía mecánica para una sola persona...Uno debe tener una agenda, anotar los pendientes y dejar una palomita en aquellos que ya hizo. Uno debe vestir formal cuando da clases, pintarse los ojos, los labios, usar maquillaje para que el contador de la escuela no se le quede mirando y pregunte si trabaja "con nosotros" porque se ve usted muy pequeña. Uno debe organizarse de tal manera que haya tiempo para los amigos, para tomar el café. 

Uno debe dedicar al menos el 10% de su salario al ahorro, pensar en las afores, porque ahora que estás fuerte y sano puedes ahorrar, imagínate cuando tengas dos hijos y una hipoteca y un auto y etc. Uno debe de administrar el tiempo, no quedarse las horas frente a la computadora leyendo cosas que escriben otros que ni conoces. Dándole a la página actualizar. Uno debe hablarle a la familia, no solo a su madre o a su padre, a sus tías, tíos, primos, primas. 

No hay que olvidarse del ejercicio, uno debe agarrar alguna clase de zumba o zamba, o como se llame, uno no debe faltar a sus clases de danza árabe los sábados, uno, por dios, no debe escoger clases de danza los sábados cuando tiene, o tenía, una clase de lenguaje audiovisual los viernes en la noche. Uno no debe tratar de acaparar tantas cosas, meterse a tantos cursos. Uno debe ser apacible, hacer las cosas poco a poco. Uno no debe, o debió, bajo ninguna circunstancia, tardarse tanto con los trabajos de investigación que son meros trámites...uno no debería creer que aporta algo.  Pero si a esas vamos, uno nunca debió estudiar literatura. 

Uno debería salir del cine, como hoy, después de ver X-Men First Class, pensando en las escenas de acción o en si Xavier estaba muy joven o si por favor el actor que hace de Magneto se lleva un diez en todos los mundos posibles. [Y lo hace, se llevan un diez oh por dios en todos los mundos posibles] Uno no debería salir del cine comentando que entiende las dos posturas, que entiende la psicología de los personajes y que es muy interesante, como lo mencionó Ap. Que magneto sea un líder judío. Uno no debería pensar en la otredad, en que el otro será "otro" siempre en un contexto. En que los seres humanos se alían en sociedades para protegerse. En el miedo a lo diferente, en qué demonios es eso que nos hace humanos. En los discursos y el poder. 

Uno no debería desvelarse por escribir este tipo de reflexiones sin sentido. Y lo que es peor, uno no debería de disfrutar  escribir y pensar y tratar de entender para desentender después y aprender y olvidar.

Uno debería ser más funcional. No ponerse nervioso al pensar qué van a desencadenar sus inquietudes en potencia. Digo, uno no debería ni si quiera de tener consciencia de esas inquietudes. Uno debería tomar pastillas de esas que no te hacen sentir. Uno no debería pensar en los antidepresivos como la mejor manera de volverse zombie [recuerdan, recuerdan esa escena en The walking dead, la serie, donde el doctor explica a sus convidados que todas esas "luces" en el cerebro, todas esas interconexiones cerebrales, recuerdos, memoria, nos hacen humanos? (a partir del minuto 4:20) (está en español de España...lo siento) ]

Uno no debería preocuparse demasiado.

 Uno debió ser, no sé... ¡una lechuga!

*Quiero hacer un post sobre este punto. No el de los taxis, sino el del egoísmo...