08 agosto, 2009
Un hotel con la cama destendida.
El collarín tirado porque el cuello no aguanta más esa indecible rigidez.
Una botella de agua todavía no abierta,
calcetines sucios,
una toalla de tapete en el baño.
El tercer acto de Tristán e Isolda en la T.V.
Ganas de aprender alemán algún día.
Ganas de pensar que por una vez uno tiene control de las cosas,
y por lo menos puede comprar sin mayores trabas un boleto de autobús.
Ganas de un tinto, o una cerveza oscura.
Pero más ganas de un desinflamatorio.
Un hotel con dos ventiladores a punto de explotar.
(al menos eso creo)
Ganas de dormir,
dolor al dormir.
Una habitación con tres camas,
una puerta al vacío del estacionamiento.
Papeles del trabajo que medio revisé.
Quiero llorar un par de días sola,
perder el conocimiento que no perdí.
Quiero leer sin fabricar mañas para el cuello,
Escribir cartas, dormir más de veintiséis horas.
***
También quiero un delfín...
De estas cuerdas:
En realidad no hablo de nada,
Escucho la televisión
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4 andantes dijeron:
entiendo esas ganas, un abrazo a ti
Qué ganas compartimos? será una enfermedad que se está propagando? será que el corazón bombea tan rápido que deja la cabeza tan caliente como si fuera carbón consumiéndosé? por qué se dana esas ganas?
Un beso Sam, siempre da sueño despues de llorar y es de los más confortantes
Sentir ganas de nada... quizá.
Te mando besos, pingüinita.
T.q.
***
Apostarle a todo, soldado***
A las tres: gracias por sus coments.
Ganas de tirar una televisión por la ventana...
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